LAZO MORTAL
Palabras emitidas por un pensamiento a modo de tabla del náufrago. Hacer el amor adentro de nuestro abrazo significó una luz negra: la oscuridad se puso a brillar. Era la luz reencontrada, doblemente apagada pero de algún modo más viva que mil soles. El color del mausoleo infantil, el mortuorio color de los detenidos deseos se abrió en la salvaje habitación. El ritmo de los cuerpos ocultaba el vuelo de los cuervos. El ritmo de los cuervos cavaba un espacio de luz adentro de la luz.
A. Pizarnik
fue abrir y cerrar los ojos una vez más y detenerse en la página indicada sin saberlo ni quererlo y girar el caleidoscopio de nuevo y que la imagen te detenga el mundo. si bien son dos instantes de respiración artificial, cientoveinte segundos de ojos para meditar, susurro entre sueños la palabra prohibida:
1 comentario:
Alejandra perdonaría desde vomitar el vino, rocío enigma de las noches, hasta las deshoras y las citas.
Lo que no perdona, son los blancos papeles que dejamos para mañana sin marcar.
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