y yo también






















te olvidaste de respirar te olvidaste de sonreír te olvidaste de mí te olvidaste de abrazarme te olvidaste de respirar te ahogaste porque te olvidaste de respirar y pataleaste pero ya era tarde y te hundías cada vez más porque te olvidaste de respirarme y ahora ya es muy tarde aunque estire mis manos y me ardan las venas de tanto sangrarte te olvidaste de todo el mundo conocido y no saliste a explorar la novedad te olvidaste de todo y de todos fundiste a negro como dice la canción y ya no te encuentro, dónde estás.

1 comentario:

g. dijo...

Se debe haber perdido en algún lugar, interesante párrafo.

Saludos.