no sé, encontré esto

como pensar paraísos irreales de mar y tierra firme, se deja ir todo por odio al amor repulsivo de adolescentes calientes. se destroza la esperanza, se juega con la carne y cuando ya no le tengo miedo a las palabras las vomito, son solo humo en mi habitación (esos vicios horribles, asquerosos como los paréntesis y mis flores en la cabeza).
miento, es compulsivo.
miento y me lo creo y soy, estoy presa de tus abrazos, no llegan, me esquivan. si supieras lo mucho que extraño respirarte hasta dejarte inerte. si supieras lo que me divierte ser tu juguete.
y el terror de caer, tan desesperada caída inesperada que ni las palabras me rozan. estoy tan sola y es tan repulsivo como el mar de día cuando las olas no cubren lo que yo no quiero ver.
cuerpos mutilados y esto es personal, íntimo, te odio, volvé, abrazo, atrapame y ahogame y no me dejes vivir, no me dejes vivir así de sola, desorden y limitación. gritar hasta que las voces queden mudas y mis palabras sean un sinsentido libre y feliz y visceral y te dé tanto miedo que salgas a esconderte con los otros, con los distintos, con los mutilados; los cuerpos mutilados por el placer del paraíso irreal de mar y de tierra firme, se deja ir todo por el engaño, ese engaño sin nombre que no te deja dormir.
yo te nombro, mentira.

todo esto que no soy yo me representa, como el fluir de la voz.