fácil

[...]

mientras tanto, abro el paréntesis de la huida y me dejo llevar al bosque donde el árbol bicolor es solo un recuerdo desteñido con olor a chicle de menta.
vos te desvanecés y te perdés entre los invisibles.
yo me quedo acá, y ni hablemos de lágrimas saladas.


ojalá todos fuéramos ese destino que no tarda en llegar.

1 comentario:

Javier dijo...

lindo post el anterior..

tan lindo que mi firma lo arruinaria :P